viernes, 11 de febrero de 2011


Otra vez le vuelve a recorrer esa extraña sensación. ¿Por qué? No lo sabe.
Una sensación de vacío, de que todo le cuesta un poco más si no le tiene a su lado, la melancolía que recorre las cuatro paredes de su habitación cuando no está con él; el olor a sueños que envuelve sus sábanas después de haber dormido juntos.
Nunca pensó que esto podría sucederle… Creyó haberlo sentido en el pasado, con otra persona distinta, pero ahora se da cuenta de lo equivocada que estaba, porque no era la misma sensación, porque ella no era la misma.
No sabe cómo explicarlo porque es difícil, pero al mismo tiempo es tan fácil sentirlo… Se siente como una niña con un vestido nuevo, se siente espléndida, importante para alguien, se siente ESPECIAL.
Se da cuenta de que todas las cosas que le han tocado vivir, todas las lágrimas que ha derramado, todos los problemas que se le han abalanzado sobre su vida tienen recompensa, y esa recompensa tiene nombre y apellidos.
Odia cuando discuten, pero casi nunca lo admite porque es así de orgullosa, pero él lo entiende y en el fondo lo sabe. Se pasan el día discutiendo cuando no están juntos, pero es debido a una tensión, a que se echan demasiado de menos el uno al otro y es esa añoranza la que les mantiene unidos en todo.
Cuando está con él siente como miles de mariposas habitan en su estómago, un suave revoloteo dulce, cargado de sensaciones, pero cuando él la besa, todo cambia; esas mariposas se revolucionan e intentan salir por todos los lados, poniéndole la piel de gallina, creando millones de escalofríos en un micro segundo… es algo impresionante.
Se siente tan afortunada, que la mayoría de veces que está con él tiene miedo de perderle, de que algo malo pase y que no puedan estar juntos, y eso es algo que la aterroriza, porque sabe la suerte que tiene de haber encontrado una persona como él y que además, el Destino, haya querido ponerle en su camino.
Te quiere, no lo dudes nunca, y a pesar de que nunca te lo haya confesado, está más que orgullosa de ti, por ser como eres, por entender todo lo que le pasa, por tener tanta paciencia con ella, por apoyarla en todo, por aguantar sus malas caras… pero sobre todo está orgullosa por la persona que le estás ayudando a ser, porque en este poco tiempo has conseguido que su vida cambie de una forma nunca vista y has conseguido cosas que muchas otras personas llevan intentando mucho tiempo sin resultado alguno.
Tú podrías haberte aprovechado de ella, haberla tratado mal o haber sacado algún tipo de provecho del hecho de que ella esté siempre pendiente de ti y que todo lo que hace y dice es por ti, pero no. Eres lo suficientemente inteligente como para saber lo que ella quiere y necesita, y lo que necesita no es una persona cualquiera: te necesita a ti.
Le gusta pensar que la quieres y que vas a estar a su lado siempre, que nada os va a separar. Que también la echas de menos cuando no estás con ella y que piensas en ella un par de veces al día.
Esta noche seguramente no podrá dormir tranquila porque se quedará hasta tarde pensando qué va a hacer mañana, que se pondrá o de qué hablará contigo el próximo día que os veáis…
Siente todo eso y muchas más cosas que no ha sabido cómo explicarme.
Es una historia bonita, pero en el fondo me da un poco de pena, porque como ella es tan “fuerte”, tan introvertida y tan orgullosa nunca se atreverá a decírtelo y tú nunca lo sabrás, así que esto quede entre tú y yo, ¿vale?

Te quiere demasiado.
Ojalá todo el mundo pudiera vivir una historia como la vuestra, porque así, todo el mundo sería feliz =)